SEGURIDAD

Violento turista en Mérida no irá a la carcel pero asistirá al psicólogo

Al no tratarse de delitos graves, la jueza de Mérida determinó la suspensión condicional del proceso penal, por lo que Joan Serra tiene que cumplir una serie de medidas

TENDENCIAS

·
Este beneficio fue otorgado al imputado porque los delitos por los que se le acusa, daño a propiedad ajena, injurias y amenazas, no son considerados gravesCréditos: Especial

Al llegar a un mecanismo alterno de solución de controversias por tratarse de delitos menores, el catalán acusado de agredir a una joven y causar destrozos en una cafetería de Mérida, Joan Serra Montagut, salió libre del Centro de Reinserción Social (Cereso), pero tendrá que cumplir una serie de medidas durante seis meses, como por ejemplo, someterse a un tratamiento psicológico. 

Este día se llevó a cabo la audiencia en el Centro de Justicia Oral de Mérida (CJOM), en donde la jueza de control Jazmín Ojeda Alayún determinó la suspensión condicional del proceso penal, que fue solicitada por la defensa del extranjero. 

Este beneficio fue otorgado al imputado porque los delitos por los que se le acusa, daño a propiedad ajena, injurias y amenazas, no son considerados graves. 

Entre las medidas que dicho extranjero tiene que cumplir durante seis meses destacan: residir en un lugar determinado; no acercarse a la víctima y al lugar de los hechos; y someterse a tratamiento psicológico en una institución pública. 

Además, vigilancia y sometimiento bajo el Centro Estatal de la Supervisión de Medidas Cautelares; abstenerse viajar al extranjero; la entrega de sus dos pasaportes (porque tiene nacionalidad española y mexicana);  firma periódica dentro de los primeros cinco días hábiles de cada mes; disculpa pública y reparación del daño de manera económica. 

En caso de que no cumpla con alguna de estas medidas durante los próximos seis meses, se reactivará el proceso penal en contra de Joan Serra. 

Al terminar la audiencia, la víctima de las agresiones, de nombre Ruth Medina, recalcó que lo que vivió fue violencia de género real y tangible, por lo que esperaba que la suspensión condicional durara al menos un año, pero no fue concedida por la jueza al considerar que era un tiempo excesivo.

Comentó que como parte de las medidas dictadas por la juzgadora, Joan Serra tuvo que ofrecerles disculpas, pero ella no las aceptó. 

“Espero que él cumpla las medidas de la suspensión, que no se me acerque. No he tenido chance de procesar todo lo que pasó durante esos diez minutos en los que me insultó, me amenazó, me intimidó”, sostuvo, al recordar el video que se viralizó en las redes sociales que prueban  los actos violentos en la cafetería. 

Ruth Medina enfatizó que decidió realizar este proceso legal porque quería ser la última mujer violentada por ese hombre.

Google News