Lo que inició como un día normal en las playas de Progreso terminó generando asombro entre turistas y habitantes locales, luego del avistamiento de lo que sería una ballena muerta flotando cerca del muelle internacional. Las imágenes y videos que comenzaron a circular rápidamente en redes sociales captaron la atención de miles de personas, convirtiendo este hallazgo en tema de conversación en toda la región.
La presencia del enorme mamífero marino provocó la inmediata movilización de elementos de seguridad, así como de personal de la Secretaría de Marina, quienes acudieron al sitio para atender la situación. Visitantes y lugareños se congregaron en las inmediaciones para observar de lejos el inusual suceso que rompe con la cotidianidad del puerto.
Aunque en el Golfo de México no es común observar ballenas tan cerca de las costas yucatecas, en ocasiones excepcionales ocurren hallazgos como este, despertando curiosidad sobre su origen y sobre las razones por las que estos animales terminan en la región. Hasta ahora, las autoridades no han emitido un reporte oficial sobre el hallazgo.
Remolcan presunto cadáver de ballena frente a las costas de Progreso
De acuerdo con los reportes preliminares, una embarcación de la Marina trabaja para remolcar el cuerpo del cetáceo, el cual fue localizado a aproximadamente 3 o 4 kilómetros de la playa. La operación ha resultado complicada debido a las condiciones climáticas y al peso estimado de la ballena, que rondaría las 15 toneladas.
Hasta el momento, ni autoridades municipales ni estatales, ni representantes de instituciones ambientales, han brindado detalles oficiales sobre la especie o las posibles causas de su muerte. Se espera que en las próximas horas se emita un comunicado oficial para aclarar la situación.
No es la primera vez: el recuerdo de la ballena de 2016
Este tipo de avistamientos en Yucatán son raros, pero no inéditos. Hace nueve años, en febrero de 2016, Progreso fue escenario de un suceso similar cuando una ballena sin vida apareció en la costa. Aquel ejemplar, una ballena de aleta de 15 metros de largo y cerca de 20 toneladas de peso, fue posteriormente exhibido como esqueleto en el Malecón Internacional del puerto, donde hasta hoy sigue siendo uno de los principales atractivos turísticos.
Las ballenas suelen evitar las aguas del Golfo de México debido a sus temperaturas cálidas y menor cantidad de nutrientes. Además, la extensa plataforma continental yucateca ofrece aguas poco profundas, poco atractivas para estas especies, que suelen preferir zonas más frías y profundas como las del Pacífico mexicano.
El hallazgo de esta posible ballena muerta genera expectación, pero también abre espacio para reflexionar sobre los cambios en los ecosistemas marinos y la necesidad de fortalecer los monitoreos ambientales en la región.