CLIMA

Polvo del Sahara llega a Yucatán y cambia el color del cielo

Una segunda oleada del polvo del Sahara cambia el color del cielo en Yucatán y genera una mayor sensación térmica

NACIONAL

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El cielo adquiere tonalidades rojizas con la nube de polvo del Sahara.Créditos: @EsMexicoExplore

Como cada año, los cielos de la Península podrían teñirse de un tono opaco y anaranjado con la llegada del polvo del Sahara, un fenómeno atmosférico que, aunque espectacular a la vista, tiene efectos reales en el estado del tiempo y la salud pública.

La primera oleada de esta nube de arena llegó a la Península a finales de mayo; el meteorólogo Juan Vázquez Montalvo, del Comité Institucional para la Atención de Fenómenos Meteorológicos Extremos (Ciafeme) de la UADY informó que esta primera fase de polvo sahariano se extendió por tres días, en coincidencia con el inicio oficial de la Temporada de Huracanes, programada para el 1 de junio.

Ahora, del 15 al 17 de julio, una segunda nube de polvo del Sahara llega a la región con el efecto principal de que se reduce la actividad ciclónica en el Atlántico, lo cual retrasa la hidratación natural de los suelos en esta época clave del año.

¿Qué es el polvo del Sahara?

Este fenómeno es originado por masas de aire cálidas y secas que se forman en el desierto del Sahara, en el Norte de África. Estas corrientes de aire están cargadas de partículas microscópicas de arena, minerales y materia orgánica, que son arrastradas por vientos alisios a través del océano Atlántico. En su travesía, que puede abarcar más de 7 mil kilómetros, estas nubes alcanzan regiones como el Caribe, América Central y, por supuesto, el Sur de México.

Cada año, entre los meses de mayo y agosto, se registran varios episodios de polvo sahariano que llegan a la región, y aunque algunos pueden pasar inadvertidos, otros tienen impactos visibles.

Efectos nocivos

Aunque la llegada del polvo sahariano puede ofrecer amaneceres y atardeceres de colores intensos, sus consecuencias no son únicamente estéticas. El fenómeno puede generar condiciones de sequía temporal, ya que inhibe la formación de nubes y, por tanto, reduce las precipitaciones.

Además, afecta la calidad del aire y representa un riesgo para personas con padecimientos respiratorios. Entre los principales síntomas reportados en temporadas pasadas se encuentran irritación en los ojos, congestión nasal, tos seca, así como agravamiento de enfermedades como el asma o la bronquitis.

“Aunque se trata de partículas muy pequeñas, al ingresar por la vía respiratoria pueden generar alergias o inflamaciones. Es importante que la población tome precauciones, sobre todo quienes tienen antecedentes de enfermedades pulmonares”, advirtió Vázquez Montalvo.

Precauciones

Ante este escenario, los especialistas recomiendan: Evitar actividades al aire libre durante la presencia del polvo, cerrar puertas y ventanas para impedir la entrada de partículas, usar cubrebocas o pañuelos a la intemperie, especialmente personas vulnerables y mantenerse informado a través de fuentes oficiales como Conagua, Protección Civil o la UADY.

Este fenómeno no es nuevo en Yucatán. El estado ha registrado episodios importantes en los últimos años, y aunque hasta ahora no es considerado una emergencia, sí requiere vigilancia y atención, especialmente si se combina con otros factores como olas de calor o mala calidad del aire urbano.

“El polvo del Sahara es un recordatorio de cómo todo está conectado a nivel global. Lo que ocurre en el Norte de África tiene efectos directos en nuestro clima, nuestra salud y nuestras actividades cotidianas aquí, en Yucatán”, concluyó el meteorólogo.

Con este evento, las vacaciones de verano inician con una atmósfera densa, literalmente. La población yucateca deberá prepararse, una vez más, para recibir esta visita del desierto africano.

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