En esta temporada vacacional, uno de los destinos más atractivos para turistas locales y nacionales es el único Pueblo Mágico de Yucatán que cuenta con playa: Sisal. Este pequeño puerto, ubicado en el municipio de Hunucmá, combina historia, naturaleza y tranquilidad frente al mar, convirtiéndose en una de las joyas del litoral yucateco.
Sisal fue declarado Pueblo Mágico en diciembre de 2020 gracias a su riqueza cultural, su importancia histórica como antiguo puerto comercial del siglo XIX y su biodiversidad única, protegida por reservas naturales y manglares. La localidad ha logrado conservar su esencia costera, con calles de arena, arquitectura tradicional y una oferta gastronómica basada en productos del mar.
Este destino es ideal para quienes buscan escapar del bullicio urbano y disfrutar de playas limpias, aguas tranquilas y un ambiente relajado. Además, llegar hasta Sisal es fácil y económico, con opciones accesibles desde Mérida en transporte público o vehículo particular.
Cómo llegar a Sisal desde Mérida
Para llegar a Sisal desde la capital yucateca hay varias rutas disponibles. En automóvil, el trayecto toma aproximadamente una hora. Se debe salir de Mérida por la carretera a Hunucmá y continuar hasta llegar al desvío señalizado hacia Sisal. La vía está en buen estado y ofrece vistas del campo yucateco.
Otra opción es el transporte público, ideal para quienes no disponen de coche. Desde Mérida, en el paradero de Hunucmá ubicado cerca del mercado de San Benito, salen vans o colectivos que llevan al municipio. Una vez en Hunucmá, se puede abordar otro transporte local con dirección a Sisal. El costo total del viaje ronda los 70 a 100 pesos por persona.
Para quienes viajan en grupo o con niños, también existen tours privados y servicios de transporte compartido que pueden contratarse en línea o en agencias locales. Estas opciones suelen incluir paradas en cenotes, haciendas y puntos turísticos de la ruta.
Qué hacer en el Pueblo Mágico costero de Yucatán
Una vez en Sisal, los visitantes pueden disfrutar de actividades como recorridos en kayak por los manglares, avistamiento de aves, visitas guiadas al faro histórico y al fuerte de Santiago. Además, el malecón y las palapas frente al mar ofrecen espacios ideales para descansar y probar platillos como pescado frito, ceviche o cocteles de mariscos.
Durante el verano, el puerto recibe una mayor afluencia turística, por lo que se recomienda llegar temprano, sobre todo los fines de semana, para encontrar lugar en restaurantes o estacionamientos. También es aconsejable llevar protector solar, repelente y suficiente agua potable.
Sisal no solo es un paraíso natural, sino también una oportunidad para reconectar con la historia y la identidad yucateca. Su ambiente tranquilo, su hospitalidad y sus paisajes lo convierten en una parada obligada para quienes buscan lo mejor del verano en Yucatán.