Yucatán se distingue a nivel nacional por conservar profundamente sus raíces indígenas, y una muestra contundente de ello es el predominio de apellidos mayas entre su población. A diferencia de la mayoría de las regiones de México, donde los apellidos de origen español lideran los registros oficiales, en esta entidad los linajes mayas siguen siendo mayoritarios, reforzando la identidad cultural del pueblo yucateco.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional Electoral (INE), en Yucatán más del 70?% de los apellidos son de origen maya, lo que pone en evidencia una continuidad histórica que se remonta a tiempos prehispánicos. Esta permanencia no solo tiene valor estadístico, sino también simbólico, pues representa una conexión directa con la cosmovisión, los valores y la sabiduría ancestral del pueblo maya.
Los nombres de familia, lejos de ser simples etiquetas, constituyen una huella del pasado y una herencia viva que se transmite de generación en generación. En esta nota, te presentamos los apellidos mayas más comunes en Yucatán, su significado y distribución, así como la importancia cultural que aún conservan.
Apellidos mayas más frecuentes y su significado ancestral
Según registros oficiales y diversas fuentes genealógicas, estos son los apellidos mayas más frecuentes en Yucatán, junto con su significado tradicional y estimación de cuántas personas los portan:
- Chan: significa “pequeño”, y lo tienen aproximadamente 73?700 personas. Es el apellido maya más común en el estado.
- Pech: traducido como “garrapata”, es portado por 63?100 personas, siendo también uno de los más antiguos.
- Canul: significa “protector de los montes, animales y hombres”, con alrededor de 47?500 personas registradas.
- May: significa “ciervo joven” y es usado por unas 46?200 personas.
- Canché: se interpreta como “serpiente de palo” o también como una planta medicinal, con 41?400 registros.
- Dzul: que puede significar “extranjero”, “caballero” o “patrón”, lo llevan 33?000 personas.
- Poot: relacionado con el acto de “perforar” o “agujerear”, se estima que 30?800 personas lo utilizan.
Estos apellidos están profundamente conectados con elementos de la naturaleza y conceptos espirituales. Reflejan la cosmovisión maya, donde los nombres estaban estrechamente ligados a la fauna, flora, fenómenos naturales y funciones sociales dentro de la comunidad.
Distribución geográfica y significado cultural de los apellidos mayas
La relevancia de estos apellidos va más allá del conteo: son indicadores de linajes históricos y muchas veces se relacionan con regiones específicas. Por ejemplo, los Canul provienen de la antigua provincia maya de Ah Canul; los Pech, del linaje que dominaba Ceh Pech; y los Couoh, de la zona de Champotón. Esta distribución territorial permite trazar mapas históricos que coinciden con antiguos señoríos mayas.
Tras la colonización española, los nombres mayas dejaron de usarse como nombres propios, pero los apellidos sobrevivieron como marcadores de linaje. Fray Diego de Landa llegó a documentar que, para los mayas, el apellido tenía mayor valor que el nombre personal, pues conectaba a las personas con su herencia colectiva y su clan familiar.
Actualmente, más de 250 apellidos de origen maya siguen vigentes en Yucatán. Algunos han sido ligeramente castellanizados —como Ek’ (“estrella”), Che’ (“madera”) o Dzul (“caballero”)—, pero en su mayoría han mantenido su forma y significado original. Su supervivencia es una prueba de la resistencia cultural de los pueblos originarios y su capacidad para preservar su identidad frente a siglos de cambios sociales.